El estudio sobre la construcción del Cuerpo Causal nos permitirá conocer con mayor amplitud el significado del trabajo constructor que realizan los Ángeles Solares, conocidos también por otros nombres como: los Manasadevas, Dhyanes de Fuego, Agnishvattas... Ellos son los Grandes Seres que introdujeron el Quinto Principio de la Mente en todo el sistema, produciendo la individualización del reino animal aquí en la Tierra y acelerando de esta forma el proceso evolutivo de acuerdo a los designios del Logos solar.
Para que los Ángeles solares puedan llevar a cabo este proceso necesitan tomar forma, esto significa que tendrán que construirse un vehículo, un cuerpo donde asentarse y convertirlo en u n canal adecuado a través del cual la Mónada pueda manifestarse en los niveles más densos por su medio y a su debido tiempo.Su finalidad consistió en dar forma a un nuevo reino de la naturaleza todavía inexistente y dotarlo de autoconsciencia, . Llevar a cabo Su misión y convertirse en un Canal por donde las energías superiores pudieran fluir al mundo externo sin hallar obstrucciones.
El cuerpo Causal se halla en el
Tercer subplano del plano mental, el plano abstracto inferior donde
el Rayo del Tercer Logos, (cuya Cualidad Inteligente desarrolló al
máximo el Ángel solar en el universo anterior) le proporciona la
necesaria Luz para su construcción.
Cuando llegó el momento de
coordinar los vehículos monádicos, (La Tríada Espiritual), los
Ángeles Solares, impulsados por una fuerza divina externa, entraron
en contacto con la materia de este subplano y lo vitalizaron con Su
propia energía, dando un impulso nuevo y positivo a la materia de
dicho plano. Esta conjunción facilitó la construcción del Cuerpo
Causal, que al principio era incoloro y transparente por el hecho de
no estar matizado todavía por la vibración de ninguno de los siete
Rayos.
Al principio de la evolución humana, el Ángel solar
permaneció con el ego recién nacido, (el hombre-animal
individualizado). Este acercamiento al ser humano, le obligó a
descender y adaptarse a los niveles más densos, pues aunque había
establecido Su morada en Manas, la atención la tenía puesta en la
consciencia de aquel ser del cual se ha hecho responsable.
Sin
embargo, el Ángel solar no dará muestras de Su Presencia hasta que
el ser humano haya crecido internamente y lo invoque, lo cual será
indicio de que el alma humana está penetrando en la Luz.
Al
principio, al descender a la materia, el Ángel solar se sumerge en
la oscuridad, sin embargo, él es Prometeo, y sabe que algún día
será liberado de su compromiso y podrá retornar al Nirvana, al
Corazón del Logos solar, de donde surgió con el fin de redimir la
materia de este segundo universo cuya finalidad consiste en
desarrollar al máximo la capacidad mental, para luego una vez
realizado Su propósito, regresar al Corazón Solar de donde surgió
para dotar de mente y de consciencia al cuarto reino.
En
esta avanzada etapa, el vehículo del Alma o Cuerpo Causal construido
por el Ángel Solar se habrá convertido en una radiante forma de
opalizados colores debido a la variedad de estados de consciencia
superiores experimentados por el alma humana en evolución, cuya
vibración se habrá elevado notablemente, dotando de una tonalidad
especial a cada uno de los cuerpos sutiles según el rayo que los
rija en cada encarnación, hasta que integre la personalidad y la
energía fluya libremente hasta los niveles causales, destacando a
través de esta Luz radiante casi incolora el color del Rayo del
Alma, que en realidad, es un subrayo del Rayo Monádico.
Al
iniciar los estudios sobre la construcción del Cuerpo Causal, no
deberíamos olvidar que el Ángel Solar es uno Constructores divinos
que hace de Intermediario entre la Mónada y la personalidad humana y
que para poder llevar a cabo su misión en la Tierra, al igual que
cualquier entidad encarnada en este universo precisa de tres
vehículos. A medida que el ser humano expanda su consciencia y
cuando haya integrado sus cuerpos, el Ángel iniciará el proceso de
apropiación de la personalidad y el alma humana que habrá crecido
interiormente, entrará en contacto con su Tríada Espiritual, dentro
de la cual el Ángel construyó el cuerpo Causal (el Cuerpo de las
Causas) y lo habitó,
De ahí que el Maestro les dice a Sus
discípulos que en todo momento centren su atención en el mundo de
las causas y dejen de lado los efectos.
La Tríada
espiritual representa la manifestación triple de la Mónada en estos
altos lugares. Son los Tres Cuerpos o vehículos que le sirven para
poder acceder hasta Su Intermediario, el Ángel solar y por medio de
Él a la personalidad humana cuando ha alcanzado la máxima
purificación.
El cuerpo superior monádico es -Atma- que se
corresponde con el cuerpo mental humano. -Budi- el aspecto
intermedio, el cuerpo astral o corazón y -Manas- el cuerpo análogo
al físico humano, el plano más denso al que puede descender la
Mónada.
Entonces podemos hacernos una idea de donde se sitúa
el Ángel solar y cuál es su función dentro del cuerpo que utiliza,
para darnos cuenta de que Su consciencia es monádica, puesto que
aunque haya descendido hasta Manas, su nivel espiritual está muy por
encima de Atma, al igual o quizás más allá que algunos de los
grandes Maestros de Compasión y Sabiduría, ya que no todos los
Ángeles solares han alcanzado el mismo nivel espiritual, sino que
dentro de su propio reino existen jerarquías evolutivas diversas, al
igual que ocurre en cualquiera de los reinos de la Naturaleza.
De
ahí la importancia de que el ser humano ascienda en consciencia y se
acerque a su Ángel solar. Somos las almas humanas las que debemos
ascender hasta el Ángel, no esperemos que sea Él quien descienda a
nosotros si no hemos alcanzado este nivel superior. Cuando el gran
discípulo lo logre, desarrollará acrecentadamente la intuición
porque habrá penetrado en el Corazón de la Tríada Espiritual y por
medio del Ángel en el plano Búdico.
Marta
Parramon Elies
Debemos acercarnos al Ángel Solar de manera permanente a fi de llegar a ser un SOLO SER.
Petons.
Gràcies.
Gracies Olga i Carles
Petons
Un fuerte abrazo
Es necesario conocer lo más básico del esoterismo pero no podemos quedarnos únicamente en ello. Siempre debemos ir más allá guiados por el impulso y el magnetismo que ejerce el Alma que nos atrae constantemente.
Una pequeña expansión nos lleva a plantearnos nuevos interrogantes que nos van abriendo la consciencia a niveles superiores, para descubrir posteriormente algo que al principio nos parecía oculto y misterioso.
Situarnos en los niveles del plano causal, o sea, en los niveles de nuestro Ángel solar, nos aleja de las formas de los tres mundos y nos acerca un poco más a la Mónada espiritual de la Cual surgimos para convertirnos en seres humanos.
Un fuerte abrazo Dani
Un fuerte abrazo.
Algo de suma importancia para no desfallecer delante de los obsáculos que la vida nos pone en el camino.
También es necesaria la aspiración superior, pues sin ella no veríamos el objetivo que nos impulsa a andar constantemente en sentido ascendente.
Gracias Marcos por estar.
Un fuerte abrazo