(Los audios en lengua Catalana son traducidos progresivamente al idioma Español)

jueves, 12 de noviembre de 2020

La pronunción de la Palabra Sagrada *OM*




Seguramente que la mayoría de los que lean este artículo han pronunciado  el OM  más de una vez. 

Practicamente todas las filosofías esotéricas y seudo esotéricas  hoy en dia lo conocen. Se ha enseñado a pronunciarlo al meditar, tanto si se trata de la práctica de algún yoga en beneficio de la personalidad como si lo pronuncia un grupo esotérico dedicado al servicio de la humanidad.
La Palabra Sagrada OM es tan solo la sílaba de un mantra antiquísimo y muy poderoso el cual  solamente es efectivo cuando es pronunciado por un Gran iniciado o un Maestro de Compasión y Sabiduría. 
Este mantra completo está formado por 4 sílabas
! OM - MANI -  PADME - UM ! 
En general quienes lo pronuncian son personas que no tienen ni idea de lo que están haciendo. Son grupos o personas individualmente bien intencionados que lo pronuncian constantemente sin saber que la efectividad de un mantram viene dada por la intención y el objetivo que se persigue y el nivel de conciencia de quienes lo pronuncian. 
La pronunciación de la OM implica mucha responsabilidad pues produce efectos internos que al ser pronunciado repercuten en el plano físico. I aquí podríamos entrar lo que implica el poder de la palabra hablada o emitida por la mente..
Todas las palabras que pronunciamos emiten vibraciones que son percibidas  por los elementales constructores de formas en cualquiera de los planos donde tengamos enfocada la consciencia. 
¿Habéis sido conscientes de la reacción que se produce en los éteres y lo que se produce en cuanto tras una meditación pronunciais el OM?
¿Sabéis que para atraer entidades angélicas constructoras de un nivel superior a los elementales o la atención del Maestro, el OM debería pronunciarse en el centro cardíaco y dirigido al coronario? 
En su pronunciación atraemos potentes energías que penetran en nuestro cuerpo etéreo y de éste al centro de conciencia en el que estamos polarizados.
¿Sabéis que el último pensamiento que tenemos antes de pronunciar la OM es el que determinará los resultados que se producirán?
Os recomiendo, (especialmente a los aspirantes avanzados y probacionistas) que vayais con mucho cuidado y que seáis responsables y muy conscientes de lo que deseais atraer, pues cuanto más avanzados esteis en el camino, más poder y consistencia tendrá lo que los devas construirán.
Mi consejo es que no lo pronunciéis nunca si estáis alterados o no estáis bien psicológicamente porque dicha alteración se acentuaré. 
El OM sólo debería pronunciarse si estamos en paz y concentrados en el servicio que pretendemos realizar. 
A medida que avanzamos en el Sendero se nos va instruyendo en las distintas Aulas internas sobre lo que son las energías, lo que significan para la evolución total del sistema, la forma de utilizarlas, los beneficios y también los peligros a que nos exponemos si no son bien utilizadas. También las diferentes formas de pronunciar el OM  según las circunstancias y como debemos pronunciarlo, si mental o verbalmente.  

Si somos discípulos consagrados conscientes del contacto interno con el grupo o el Maestro, tambiém podemos pronunciarlo en momentos críticos de peligro para invocar Su protección.  
En el proceso de una curación...cuando prestemos un servicio protector a otros reinos de la Naturaleza y en tantas otras circunstancias. En cuanto esteis preparados sabreis que y cómo hacerlo.
Intento explicar que no es conveniente hacer "de aprendices de brujo" porque podemos salir escarmentados, sobre todo  cuando desconocemos el poder de las energías dévicasque estamos tratando de utilizar.

Si nuestra intención consiste en prestar un servicio en bien de alguien en concreto o de la humanidad, las energías circularán a través de vuestro cuerpo etérico sin producir ningún problema en vuestra salud, pero así y todo hay que saber que cuanto entran energías tan poderosas de 7º rayo como las actuales, al pronunciar el OM nuestro sistema nervioso se ve fuertemente estimulado, porqué ya sabéis que las energías circulan por los Nadis que son la contraparte del sistema nervioso físico, pudiendo producir fuertes desequilibrios nerviosos.

Si somos aspirantes avanzados en cuanto pronunciamos la Palabra Sagrada las energías atraídas llegarán también a las personas más cercanas que nos rodean puesto que serán irradiadas a través de nuestra aura, produciendo reacciones en ellas que pueden ser positivas si están a nuestra misma sintonía evolutiva o superior, pero si no es así, habrá  no lo están, su aura (su consciencia) no las aceptará produciéndose un rechazo de forma visible, generalmente personal. 
Todo ser humano avanzado sabe que la energía que atrae al pronunciar el OM tiene mucho más poder que si lo pronuncia un simple aspirante, tanto si lo pronuncia mentalmente como de palabra, sin embargo en cada circunstancia tendremos que saber si pronunciarlo de una forma u otra y que la afluencia de enrgías atraídas se extiende a mucha más distancia de la que nos podemos imaginar a través de los éteres. Cuanto más avanzados estemos más se expandirán dichas energías.

Todo acto de servicio externo es el resultado de las enseñanzas que recibimos en las Aulas internas cuando nos vamos a dormir. Seamos conscientes o no de estos encuentros los resultados se hacen evidentese en el servicio que llevamos a cabo en el plano físico. Este entrenamiento empieza desde la etapa en que el ser humano común se convierte en aspirante espiritual y se le enseña a servir a la humanidad. 
Los resultados se ven en cuanto empezamos a actuar de forma altruista, cuando protegemos a los animales o a las plantas, en cuanto demostramos con nuestro ejemplo la buena voluntad y las correctas relaciones.   
A partir de este momento el OM Sagrado empieza a resonar dentro de nuestro corazón.
Es la voz de nuestro Yo superior. Esta vibración interna que en principio no reconocemos se va repitiendo cada vez con más frecuencia hasta que se expande a través de la radiación de nuestra aura fundiéndose con la OM que emite la entera Creación.
 
Marta Parramon