Artículo traducido del Catalán al Español publicado en el blog " Teosofía Rama Armonía" el 24/01/2013
Durante el largo recorrido de experiencias que vivimos la humanidad se van sucediendo pequeñas expansiones de consciencia que nos revelan zonas desconocidas dentro y fuera de nosotros mismos y a la vez nos abren la visión de una etapa más del camino.
Habiendo recorrido una buena parte se divide en dos y entonces no tenemos otra opción que escoger, por una parte la indecisión e inseguridad de no saber lo que nos vamos a encontrar es angustiante, el miedo nos aturde y no sabemos que debemos hacer.
Pero las pequeñas expansiones que hemos ido experimentando no han sido en
vano y al igual que si fuera una pequeña vela encendida nuestra consciencia se ha fusionado con las demás, dándonos la luz suficiente como para poder ver la naturaleza de estos dos caminos.
En esta etapa evolutiva la vida nos pone a prueba, tenemos que escoger entre el camino de la derecha o el de la izquierda. Quienes habéis estudiado la Teosofía o las Ciencias ocultas sabéis muy bien lo que esto significa, aunque sólo sea en teoría.
Cuando la mente intelectual llega a un desenvolvimiento suficientemente avanzado como para poder discernir y discriminar no podemos escudarnos y dar la espalda a nuestras responsabilidades diciendo que no no es cosa nuestra. Quizás actualmente estemos huyendo de nuestra responsabilidad , pero al final no nos quedará otro remedio que seguir ascendiendo el camino superior que nos señala nuestra Alma, o por el contrario, seguir creciendo en sentido descendente por el camino del materialismo.
No podemos retener el pasado, porqué aunque nos cueste entenderlo,todo cuanto podamos vivir y experimentar en una vida donde se cultivan los valores materiales, si únicamente pensamos en satisfacer las demandas personalidad nos estamos dirigiendo a la oscuridad y al mundo de las sombras, allí donde la Luz languidece y predomina cada vez con más intensidad las fuerzas del materialismo. Quizás os preguntareis porqué he dicho que el camino de la izquierda también es ascendente.
El bien y el mal son inherentes en este universo, considerando que el bien es el aspecto Espíritu y el mal el aspecto Materia, constituyendo la eterna dualidad de este segundo universo.
Hemos estudiado todo referente a la Magia Blanca y creemos que todos los seres humanos llegaremos a ser magos blancos, pero esto dependerá del camino que escojamos en este cruce donde hay que tomar de la indecisión.
Por los estudios realizados conocemos la existencia de la Gran Fraternidad Blanca del planeta que vela por la humanidad señalando el camino de Liberación del dolor y la desdicha. Pero debemos saber que también existe una Jerarquía de Magos negros muy bien organizada y con gran poder, que también llegan al adeptado dentro de los límites que ofrece el materialismo., sin embargo, no pueden ascender más allá de la mente concreta . Pero en este nivel tienen un gran poder que aprovechan tratando de conducir a la humanidad hacia el camino del egoísmo de la materia. Esta Jerarquía que sigue el camino de la izquierda no puede ascender a los niveles del Alma porqué se quedan enclavados en el poder de la mente a unos niveles inimaginables de densidad material.
Los seres humanos disponemos de un libre albedrío en esta etapa evolutiva somos perfectamente conscientes de lo que significa uno u otro camino.
Sin embargo cuando se nos pone a prueba es necesario desprendernos de una parte de nosotros mismos, no podemos retener nada del pasado que nos impida avanzar en sentido ascendente, pues si escogemos el camino espiritual, tendremos que ir renunciando a lo personal hasta desembarazarnos del peso acumulado en el tiempo. No podemos seguir llevando a cuestas lo adquirido en el pasado y al mismo tiempo conquistar el reino de los cielos. En el Quinto Reino únicamente entran las Almas.
Viendo a la humanidad en conjunto podemos darnos cuenta que hemos llegado a esta encrucijada del camino. Ahora más que nunca se hace evidente la entrada en Acuario y nosotros los seres humanos estamos siendo sometidos a la prueba más difícil de pasar, ya que demanda renuncia de los valores caducos que hemos heredado de un lejano pasado y con los cuales nos seguimos identificando. Cristo dijo a Sus discípulos una frase muy simbólica y muy significativa que quizás muchos conocéis,
"No se puede poner vino nuevo en odres viejos"
No podemos seguir arrastrando las tendencias, costumbres y formas de pensar y de vivir del pasado, porqué estamos bajo la influencia de nuevas y más prometedoras energías que exigen unos nuevos y superiores valores. Es necesaria una renovación total empezando cada cual por si mismo si verdaderamente queremos contribuir a liberar a la humanidad del dolor y el sufrimiento que parece no tener fin.
Vista desde el ángulo oculto la gran crisis mundial es una lucha de consciencias, una terrible batalla que se está librando en el plano astral entre el bien y el mal.
Sin embargo si los seres humanos que somos conscientes de esta realidad escogemos el camino de la derecha y esto significa poner a la práctica los nuevos valores, podremos hacer decantar la balanza a favor de las fuerzas de la Luz. Y aunque aparentemente sólo vemos desorden, violencia y guerras, en una gran mayoría de la humanidad está creciendo dentro de su corazón la semilla de la espiritualidad demostrada en la buena voluntad.
Puede que un gran sector de la humanidad no se aperciba de este despertar y sin embargo algo muy importante está cambiando en su interior. Esto ocurre porqué lo interno no es aparente, porqué su desenvolvimiento se produce en los niveles ocultos de la consciencia.
Nos preocupamos demasiado por todo lo negativo que nos ofrecen los medios de comunicación, los contactos sociales que establecemos, además nosotros mismos en nuestra vida diaria. No diré que no tengamos que poner atención a las responsabilidades o acontecimientos que se produzcan en nuestra propia vida. Debemos estar bien informados de lo que ocurre en el mundo y ayudar en todo cuanto nos sea posible para remediarlo, pero teniendo siempre en cuenta que las fuerzas de la oscuridad basan su poder en fomentar el miedo y el terror a fin de paralizar la acción correcta y evitar el avance y el progreso espiritual de la humanidad.
Nuestra mente debería estar siempre centrada en lo positivo.
Quienes seguimos las enseñanzas esotéricas sabemos que "la energía sigue al pensamiento" y si centramos nuestra mente en lo negativo le estamos dando más vida. Tenemos pues la información y las herramientas necesarias para construir un mundo mejor.
Recuerdo una frase del Maestro Koothumi en respuesta a la pregunta que le hizo un discípulo suyo,
¿ cómo luchar contra el mal?, la respuesta fue esta ...
! No hay que luchar contra el mal, hay que
practicar el bien !
Marta Parramon Elies
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